Ropa de cama para niños

Sábanas, nórdicos, mantas, sacos de dormir… ¿Qué es lo mejor para que el bebé duerma cómodo, calentito y a gusto?

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Uno de los indispensables a la hora de preparar la habitación del bebé es la ropa de cuna. Existen muchas opciones, y cada una de ellas tiene sus pros y sus contras. Por eso, lo bueno es combinarlas todas según la época del año, la edad de tu hijo, sus movimientos mientras duerme…

Lo que necesitarás siempre es un empapador para el colchón y una sábana bajera. Después, puedes usar un saco de dormir, ideal para bebés hasta los 18 meses más o menos, ya que les permite estar calentitos y evita que se enreden con la sábana, evitando el síndrome de muerte súbita del lactante y la asfixia.

Existen sacos de diferente TOG o grosor para cada época del año, desde los más finos ideales para el verano, con temperatura de la habitación a unos 25 grados, hasta los que sirven para temperaturas muy bajas, unos 16 grados.

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A partir de esa edad los sacos limitan el movimiento del niño, sobre todo cuando le pasas de la cuna a la cama, ya que le impiden levantarse de la misma. Por eso, a esta edad es buena idea usar sábanas y manta o funda nórdica. Si tu hijo es de los que se mueven mucho y no permanecen debajo de la ropa de cama ni un segundo, opta por un buzo.

Es importante que tengas mucho cambio ya que los niños enseguida se hacen pis, manchan la sábana de mocos, vomitan… por lo que puede que tengas que cambiarlo a menudo.

- Elige siempre tejidos naturales y, a ser posible, ecológicos, que cuiden la piel de tu hijo. El algodón es una fibra natural ideal para bebés.

- También deben ser transpirables para evitar que acumule sudor.

- El diseño es importante, sobre todo cuando hay épocas de cambio como pasar de la cuna a la cama o de la habitación de los padres a la suya.

- Ten en cuenta las medidas de la minicuna, la cuna o la cama para que se ajuste lo mejor posible.

- Hay que tener en cuenta también la edad del bebé para elegir aquella ropa de cama que mejor le vaya. Como decíamos, para los bebés lo mejor es el saco de dormir, mientras que en niños mayores es más cómodo el edredón o nórdico.

Fuente: Ajram, Dr. Jamil, Tarés, Dra. Rosa María (2005), El primer año de tu hijo, Barcelona, Ed. Planeta. Fecha de actualización: 21-09-2021 Redacción: Irene García

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